Esto se da entre la sospecha de que el equipo le pertenecía al crimen organizado del centro de México, lo que derivó en una investigación de la Procuraduría General de la República y así, la Federación Mexicana de Fútbol Asociación decide terminar las sospechas y desaparecer al equipo, pagando alrededor de diez millones de dólares a sus propietarios, camiseta de brasil mundial 2022 de los que nunca se conoció su identidad real.